Urantia, 2 de agosto del 2004.
Un Maestro llamado: El Amado.
Tema: “Una Lección En Confiar.”
Recibido por Lytske.
El Amado: “Si, espérame en el Silencio, hasta que sientas ese sagrado silencio envolviéndote, y entonces estarás listo para recibir mas instrucciones de lo que no sabes. Con total confianza de tu parte es que vienes ante Mí, sin saber que esperar, y ese, niño(a), es exactamente el tema del cual quiero enseñarte mas. Es esa confianza que solamente puede incrementarse cuando no Me puedes ver y aun así tienes la esperanza de que Yo esté allí.
“La esperanza humana en el Dios que no se ve lleva a la fe y eventualmente a confiar. Esa confianza no es algo que se obtiene de la noche a la mañana, se va construyendo de piedra sobre piedra, por decirlo de esa manera. Se necesitan superar muchas dudas y aun así frecuentemente dudas y te preguntas a ti mismo(a): ‘¿es esto real?’ Te digo ahora niño(a) que mientras mas confianza tienes en Mí y escuchas Mi Calmada y Pequeña Voz dentro de ti, confiar se vuelve más fácil.
“Confiar no es algo innato en los humanos de este pequeño planeta Urantia—siendo ese su nombre en tu registro del universo. Este planeta sufrió la mas grande de las traiciones y trastornos hace mucho eones, aun mucho antes del tal llamado pecado de Adán y Eva, el Hijo e Hija Material que fueron enviados aquí para ayudar a mejorar biológicamente a las criaturas de este planeta. Ese tiempo tan distante del cual estoy hablando ocurrió muchísimo antes de eso cuando el soberano del sistema, Lucifer, se descarrió y denunció la existencia del Dios Eterno. Tu Príncipe planetario de aquel tiempo, Caligastia fue fácilmente influenciado por el manipulador, y mano derecha de Lucifer, Satanás, el cual fue enviado aquí con ese propósito.
“Tus viejos archivos no están correctos, ya que los eventos mas importantes no fueron registrados o simplemente fueron omitidos de las traducciones.
“Regresando al tema de la confianza, la gente de aquel distante tiempo había a duras penas desarrollado las mentes en pensar independientemente y el resultado fue una gran confusión, la cual todavía hoy sigue siendo corroborada con los varios sistemas de credos. Si todo hubiera sido como estaba planeado, tu planeta estaría en un estado mucho mejor del que esta ahora. Las guerras serían una cosa del pasado, y la mayoría de las enfermedades, las cuales ahorita proliferan sobre el planeta, hubieran sido erradicadas.
“Esas son las secuelas por falta de confiar en el Único Dios Eterno y en Sus varias delegaciones, mandadas para ayudar a mejorar las razas mortales en los planetas del tiempo y espacio. Tocaremos el tema de confiar en otro momento, pero necesitas saber, por qué la sospecha se ha convertido en tal veneno para el espíritu. Eso es no confiar.”
Traducido por Loyda Mira.
© Grupo de Progreso 11:11.
Trata de salirte de las sombras poco a poco —
Ajustador del Pensamiento.