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Urantia, 3 de agosto, 2005.
Un Maestro llamado “El Amado.”
Tema: “Una Lección sobre la Nutrición del Yo.”
Un Receptor Contribuyente.
El Amado: “Permíteme decirte que cada momento es una nueva oportunidad para estar en los asuntos del Padre. Te he dicho anteriormente que el hacer la Voluntad del Padre simplemente consiste en caminar el sendero con un máximo amor. Primero que todo esto significa que uno se va volviendo cada vez más paciente y tolerante, no solamente con otros, pero también con uno mismo, y esto especialmente es una verdad para aquellos que se envuelven en la auto-recriminación y están llenos de inseguridad y baja autoestima.
“¡Deja de hacer eso! Comienza a verte a ti mismo como un digno hijo de Dios que tiene el derecho de existir y tiene su lugar en el gran plan de las cosas. La baja autoestima es una gran defraudadora de los placeres de vivir una vida piadosa, una vida honorable porque te ocupas mucho de estar pensando en un nivel bajo y el pequeño ego te carcome, y con eso el gran yo se marchita por la falta de nutrición.
“El aspecto de la nutrición del yo ser es lo que deseo presentar en primer plano. No la indulgencia con uno mismo, a decir verdad. Allí existe una gran diferencia entre estas dos. La primera siente la necesidad de ser nutrida y alimentada por el yo-alma, pero para que esto pueda suceder, el yo-alma necesita ser nutrido primero por el Yo espíritu superior—aquella interior Chispa de Dios.
“Desde luego no todos están conscientes de esa “función,” pero la verdad queda en que uno es nutrido por el otro, y él o ella tiene que estar dispuesto a tomarse el tiempo para ir a su interior y buscarlo y hacer esa conexión que permita a la Esencia de este Yo Superior impregnar y alimentar el yo-alma y reintegrarse en la Tranquilidad del Silencio, mientras que el yo de la auto-indulgencia busca una gratificación inmediata en todos los niveles de la vida, sin darse cuenta que algo mucho más importante está siendo descuidado.
“Esta es la diferencia, aunque entre ellos hay variedad de ‘tonos.’ Algunos están dispuestos pero la carne es débil y se apodera de muchas formas. La manera de estar alimentado como Dios toma primero perseverancia en asignar un tiempo aparte y ocuparse de hablar y escuchar a la interior Chispa de Dios. Los que regularmente se dedican a esta clase de alimentación sienten ellos mismos que se hacen más fuertes y mayormente capaces de resistir a las vicisitudes de la vida. No es que la vida fluya mas fácilmente para ellos, no, pero ellos han descubierto la Roca de sus seres, porque ellos han perseverado y aprendido y han recibido las seguridades del amor y eso perdurará para siempre en el templo sagrado de sus seres.
“Ellos van en la vida con una confianza renovada, porque sus contactos están solidificadamente originados en el que Todo lo Es. Ellos avanzan en una vida de servicio, porque ha como ellos reciben, ellos dan a otros y un círculo sólido de frutos cosechados en el espíritu entonces se establecerá. No es que tales sean perfectos. De ninguna manera, pero ellos van camino hacia eso y recorren la ruta en sinceridad con la más alta verdad, belleza y bondad. Es el camino con más amor, porque ellos mismos saben lo que es ser amado por algo tan increíble, lo cual necesita experimentarse para saber de este amor. Tal es la verdadera nutrición—una vida vivida con el mayor crecimiento y satisfacción del yo-alma, la cual es el homólogo espiritual para la próxima fase de existencia. Bienaventurados son aquellos que perseveran en el buscar, ya que ellos son los que encontrarán a Dios y serán abrigados por Su Amor.”
Traducido por Loyda Mira.
© Grupo de Progreso 11:11.
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